sábado, 14 de julio de 2007

" UNO" ( cuento)

“Uno”


Estaba mas nervioso que angustiado, mientras preparaba la mochila, pensaba que esta sensación de abandono terminaría cuando subiese al tren. No sabía tanto de Buenos Aires, lo suficiente como para llegar hasta el regimiento número uno del Ejercito. Muchas cosas se dicen de la gran ciudad, solo que el no tendría la suerte de poder recorrerla, ya que las tropas de todo el país estaban marchando hacia Las Islas Malvinas.
Sale de su habitación y ve a su madre con lágrimas en los ojos esperándolo de pie junto a la mesa del comedor, al verla Ignacio camina para abrazarla. Tras breves consejos de ella, lo despide dándole un beso eterno.
La guerra duro casi tres meses y los soldados comenzaban a volver a sus hogares. La guerra se había perdido y la tristeza del pueblo era evidente.
El día ochenta y uno, contados amorosamente por su madre, suena el teléfono en la casa de Ignacio, su madre deja caer los cubiertos que estaba lavando en la cocina y lo mas rápido posible se traslada al comedor:
- Hola!!
- Hola Mamá, como estas!
- Querido ..Eres tú... como te encuentras???
- Bien! Estoy bien, ya me encuentro en el continente, me junte con una chica que conocí aquí y tenemos pensado casarnos. Es una buena mujer Mamá .... con las características que siempre has soñado, en una mujer para mi...
- Que bien Ignacio.. No sabes la alegría que me das...
- Bueno Mamá te tengo que dejar por que estoy en el trabajo y llamando a escondidas.. no te asustes si no te llamo enseguida, es que seguro me sale un trabajo embarcado en Puerto Argentino, para una flota pesquera de Tierra del Fuego, te mando muchos besos, te quiero muchísimo y cuídate mucho Mamá!
- Adiós hijo espero tu llamado, yo también te quiero muchísimo... hasta pronto!!!
- Hasta pronto, adiós...

El tubo del teléfono cae al vacío golpeando en la silla de ruedas y de inmediato en el piso, un enfermero toma el mismo y cuelga. Ignacio estaba en un hospital donde se encontraban los soldados Argentinos y en una hora tenia que ser sometido a otra operación. La exposición al frío extremo había provocado el congelamiento de sus extremidades y parte del rostro, después de haber quedado durante días en una trinchera.
Los médicos estaban tratando de salvarle los dos brazos y una pierna.

En la actualidad, los ex combatientes, son discriminados, careciendo de las mismas posibilidades y derechos que los demás ciudadanos, siendo imposible su reinserción y proyección de futuro; lo que demuestra nuestra ignorancia, egoismo y deshumanización como pueblo y sociedad.

Hora y media después, mientras lo preparaban para la operación, su corazón no resistió la anestesia.

"...un país sin pasado histórico, ni origen, ni cultura y con amnesia permanente, es un árbol sin raíces y de frutos amargos..."

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