viernes, 8 de agosto de 2008

" Encuentro" ( cuento)

Encontré al Amor sentado a orillas del mar llorando y no supe que decirle.
El me miro y en sus ojos vi todo su dolor:
vi al ser que creó el universo y no fue Dios sino un pájaro azul,
vi también a Moisés cuando escribía las tablas desesperado,
vi a Jesús rezando en la cruz por todos nosotros mientras que un ángel recogía sus lágrimas;
encontré en sus ojos las hordas de romanos guerreando e invadiendo, saqueando y destruyendo el mundo, vi toda la edad media , vi a Hitler, vi todas las guerras y miserias sufridas por millones de seres,
vi Hiroyima y Nagasaki;
también me mostró con su penetrante mirada, todas las obras de arte, los inventos, los engaños, las mentiras;
también vi las consecuencias de la vanidad del hombre, vi la avaricia de todos los políticos corruptos, mercenarios institucionales y asesinos de generaciones, confabulando y engañando,
vi animales muertos, cielos negros, tierras áridas, ríos envenenados, enfermedad y muerte.
Me miró profundamente y en su mirada vi la ira de Dios,
vi la ira de todos los aborígenes inocentes masacrados para saquear su plata, su oro, su tierra,
vi la ira de Pacal Botan, de Atahualpa, de Pinzen, de Moctezuma, de Chalimin, de Namuncura, de Caballo Loco, del Che Guevara, de Volivar, de San Martin, de Moreno, de Belgrano y los vi llorar a todos;
vi a la madre de Cristo llorando desconsolada y la vi reflejada en cada sufrimiento de todas y cada una de las madres del mundo a lo largo de la historia,
vi mi nacimiento, mi abandono, vi mi crecimiento, obra y muerte, vi el destino de todos de principio a fin;
me mostró en su visión todo el poder de la naturaleza, su eventual enojo y revancha hacia los hombres,
vi la destrucción de la raza humana y todas las demás.
Y no lo pude soportar, le di la espalda, me tapé el rostro con las dos manos e irrumpí en un llanto inconsolable y en ese momento el Amor me dijo:
- Llora si quieres pero no sufras de mas, tu preocupación por mi dolor es mi consuelo y tu camino.-
Cuando me di vuelta para mirarlo, en el lugar donde estaba sentado, había una flor.